Principales retos de la gerencia en 2024
Una visión integradora del negocio, nuevos patrones de consumo, influencias por tecnologías disruptivas, forman parte de los desafíos del presente año
Transcurren los primeros días de 2024. A nivel gerencial, es una época idónea para comenzar nuevos retos, realizar mejoras, incursionar en novedosos mercados, incrementar la cartera de clientes o ampliar el portafolio de productos. El comienzo de año es una oportunidad para renovar las fuerzas y las metas, porque nuestra mente se reprograma para que todo sea mejor.
En estas fechas también se escriben desafíos internos, como mejor nuestra condición física, hacer ejercicio, comenzar una nueva especialización, retomar proyectos, comenzar nuevos o conocer otros países, por mencionar algunas motivaciones.
Para el ser humano, los cambios no solo son importantes, sino absolutamente necesarios para vivir una vida con propósito, en donde como resultado cada uno obtiene un crecimiento personal y laboral acorde a su esfuerzo. Y esto depende del grado de motivación con el que se asumen los retos, es decir, qué tan alineados estén los desafíos con nuestros intereses personales, porque solo así se contará con la tenacidad para alcanzarlos.
Pero ¿cuáles son los principales retos de la gerencia en 2024?
La ingeniera Patricia Spat, quien se desempeña como “consultant for a better management” en Argentina, los desafíos gerenciales del presente año son grandes, por ello “los gerentes necesitan tener una visión muy integradora del negocio, el mercado, los equipos, los clientes y los stakeholders”. Así también, considera prioritario contar con la capacidad para desarrollar su trabajo en escenarios complejos, con cambios constantes. “Ya que nuestros países atraviesan por circunstancias que impactan en el desarrollo de los negocios y esto requiere una adaptabilidad constante”.
Para el Gerente del Año AGG 2023, Roberto Way Menéndez, los principales desafíos que enfrentan los gerentes “están relacionados con un entorno político y económico cambiante a nivel local y mundial. Nuevos patrones de consumo, influencias por tecnologías disruptivas, que harán necesario innovar para cumplir con las expectativas de los consumidores. Así también, un mercado laboral más complejo, que hará necesaria una gestión del talento más creativa”.
Estos retos, sin duda, deben ser considerados para formular la estrategia empresarial del año. Según Spat, lo recomendable es “diseñar estrategias a mediano y largo plazo, obviamente sin desestimar el corto plazo”. La idea es contar con una estrategia robusta que indique el norte, hacia dónde queremos ir y, de esa manera, hacer los ajustes en el corto plazo.
La especialista hace la analogía con la navegación, “seguramente durante el trayecto vamos a hacer ajustes de velas, tomando en cuenta desafíos que hacen más interesante el recorrido. Sin embargo, es una buena oportunidad para que el timonel demuestre su pericia”.
Spat recalca que, la estrategia debe tener claro el resultado que se desea alcanzar y, más importante, cómo se va a lograr. “Hoy en día, contar con información y datos sobre la industria facilita la toma de decisiones, independiente del tamaño de la empresa”. En resumen, explica que, “hay factores internos que se pueden manejar y externos que se pueden tomar como grandes oportunidades para la empresa”.
Para la formulación de la estrategia, Way, quien además el presidente del Consejo de Administración de Agencias Way, recomienda comenzar por “hacer un análisis del entorno, tanto económico, como político y social, que no depende de la organización, pero que la incide y afecta”.
“A lo interno”, advierte el directivo, “se deben definir los objetivos, alineados a la visión y misión, así como los KPI’s para medir los cumplimientos. Estos deben ser claros y alcanzables con los recursos con que cuenta la empresa y en relación con el segmento de mercado objetivo”.
Para Roberto, “en esta planificación deben participar todos los niveles de la organización. Desde la dirección ejecutiva, las gerencias de los departamentos funcionales y, de ser posible, mandos medios operativos. Las directrices de la planificación usualmente vienen del Consejo de Administración, del que deben formar parte los consultores externos, expertos en temas específicos.
Patricia concuerda en que, los líderes o gerentes de cada área deben estar ahí. Pero, no solo para escuchar, sino para opinar y proponer ideas que aporten a la mejora continua de la planificación o el business plan. “En mi experiencia, cuando la gente se siente parte desde el inicio, se obtiene un involucramiento efectivo en el logro de los resultados. Al compartir las oportunidades de mejora y el éxito, se alcanza un impacto positivo en el clima de los equipos de liderazgo y de la organización”, explica.
Sin duda, socializar el plan es todo un desafío. Para ello, Spat dice que la comunicación debe ser buena, es decir, clara, accesible a todos, aunque en algunas oportunidades se debe trabajar un poco más. “No es suficiente con que los líderes estén involucrados en la planificación, aunque es importante nunca es suficiente”. Todo plan de comunicación debe ser robusto y facilitar la comunicación entre el equipo encargado de hacer que fluya y los líderes de las áreas. Para ello, se deben usar los medios de comunicación interna y también reforzar los contactos con los integrantes de cada equipo. “Es aquí en donde los gerentes juegan un rol determinante en la comunicación clara, oportuna y asertiva”, subraya la profesional.
Roberto es de los que consideran que la estrategia debe estar alineada a los objetivos de largo plazo, y que su implementación requiere de todas las unidades de la organización, las que también deben estar alineadas y unidas a la estrategia. “Para esto se debe contar con canales de comunicación, procesos, sistemas y feedback. Usar el lenguaje adecuado para comunicar la estrategia y que esta se convierta en parte del día a día en el trabajo”.
Lo que es importante, es no perder de vista que la estrategia y el plan deben tomar en cuenta el desarrollo del talento humano. “Es importante que los equipos estén motivados y enfocados”, dice Spat. Para empoderar a los equipos de trabajo recomienda: 1. Mantener sesiones de feedback. 2. Tener esas conversaciones difíciles que contribuyen al desarrollo de las personas.
Según la profesional, muchas veces se tiene la idea errónea de que, hablar de talento implica hacer un convenio con la más prestigiosa escuela de negocios. “Sin duda, esto es importante, pero también lo es que un líder se convierta en un buen mentor. Para ello, se necesita un rol model que acompañe, motive e inspire a las personas a pensar fuera de la caja; que se asigne a ese colaborador a trabajar un proyecto diferente, por citar algunas acciones que potencian el talento humano. “Se debe invertir tiempo y recursos en determinar las fortalezas de nuestra gente y construir el mejor equipo basado en esas fortalezas”, puntualiza la experta.
Way está de acuerdo en que, la mejora continua busca la eficiencia operativa, y que esta está relacionada con el aprendizaje permanente en los equipos de trabajo. “Hay muchas y diversas herramientas, todas orientadas a crear un ambiente de comunicación abierta, como podrían ser promover lluvias de ideas, encuestas, retroalimentación y dinámicas de desarrollo organizacional”.
Para estos fines, la AGG se especializa en preparar a los gerentes de manera integral, porque está convencida de que los desafíos, la superación y el crecimiento personal forman parte de las nuevas y competidas gerencias.
Ileana López
Periodista
Revista Gerencia
gileana@agg.com.gt