La visión empresarial del problema ambiental
Los empresarios están conscientes de que vivimos un momento complicado en términos ambientales. Sin embargo, su análisis causa-efecto dista de lo que plantean los grupos de la sociedad civil
El medioambiente es un tema que en Guatemala genera conflicto social. Mientras los habitantes, principalmente de áreas cercanas a potenciales proyectos productivos se quejan de ser afectados por estos, fundamentalmente en términos de salubridad y deterioro del medio ambiente, los empresarios lo niegan y aseguran que son argumentos falaces de líderes sociales para mantener su status.
De un tiempo para acá, los deslaves en tiempos de invierno o hasta en verano y las inundaciones producto del crecimiento de los ríos, se han incrementado. Los ciclos naturales del tiempo de invierno o de verano se han visto alterados por fenómenos como el del niño o el de la niña. Las temperaturas ambientales también revelan aumentos, generando temporadas calurosas más allá de lo que estamos acostumbrados.
Los defensores del medio ambiente, principalmente de aquellos grupos considerados dentro de un sector conocido como sociedad civil, aseguran que todo lo que sucede es parte de lo que globalmente se conoce como Cambio Climático. Pero hay quienes, dentro del sector empresarial, que consideran que lo que vivimos es un momento natural dentro de los ciclos históricos de la tierra.
Quién tiene la razón, pues de momento cada quien defiende su teoría. Lo cierto es que las evidencias y los argumentos allí están, a la mano de todos, para que cada quien saque sus propias conclusiones.
Una red empresarial
Los cambios en el ambiente nos afectan a todos. Por eso es que los movimientos tendientes a buscar la mejora de las condiciones climáticas son comunes hoy en día. Y el sector empresarial no es ajeno a este tipo de movilizaciones. A lo que resulta aparentemente ajeno es a la manera en que otros grupos conciben las causas del deterioro y, por supuesto entonces, a las posibles soluciones que deben darse al problema.
Ramón Parellada, miembro fundador de la Red de Amigos de la Naturaleza (Rana), es puntual al referirse al tema. Según él, el fondo del problema está basado en la falta de certeza en la propiedad privada.
Los seres humanos, dice Parellada, solemos proteger y cuidar lo que es nuestro, pero mostramos desinterés por lo que es de otros. Dentro de esa lógica, el también profesor en la Universidad Francisco Marroquín explica que mientras no haya certeza en la propiedad sobre el suelo, los problemas ambientales y los conflictos continuarán.
En esta argumentación, Parellada intenta explicar también que la pobreza es una de las principales causas de la contaminación ambiental y por eso es que deben buscarse mecanismos rápidos, propicios y efectivos para erradicar esa condición humana. Según él, por ser pobres, muchos guatemaltecos se ven en la necesidad de usar los árboles como leña para cocinar, tiran la basura en lugares inadecuados, utilizan los ríos como desagües e incluso como basureros.
Por ello, deben promoverse acciones que ayuden al desarrollo humano de todos los guatemaltecos, principalmente de los más pobres, pues de esa manera mejorarán sus ingresos y ello incidirá también en la obtención de un mejor ambiente, no sólo en Guatemala sino en todo el mundo.
Simon Kuznets explica de una manera más técnica y científica esta teoría en su conocida Curva de Kuznets. Esta hipótesis plantea que los países son igualitarios, pero con el desarrollo de los pueblos los ingresos se concentran y la distribución del ingreso empeora. Pero mientras más desarrollo hay, el ingreso vuelve a mejorar y la situación genera un balance.
De allí que Parellada, fiel creyente de esta teoría de Kuznets, asegura que debe atacarse la pobreza para mejorar el medio ambiente, pues las familias con mejores recursos dejarán de utilizar la leña para cocinar, tendrán recursos para pagar la extracción adecuada de la basura y gracias al desarrollo tendrán acceso a servicios de alcantarillado que faciliten las municipalidades o el gobierno central.
En estas condiciones, según el analista, el Estado, como garante de los derechos y obligaciones de sus habitantes, es el responsable de promover las acciones suficientes para la búsqueda del bien común, principalmente en tres áreas específicas: el derecho a la propiedad, la educación y la seguridad y la justicia.
La red Rana
Jorge David Chapas es el director ejecutivo de la Red de Amigos de la Naturaleza (Rana). Esta es una agrupación de corte eminentemente empresarial que busca fomentar un mejor medio ambiente para los guatemaltecos.
Sus planteamientos están fundamentados en lo que nos explica Parellada, aunque Rana, por su propia naturaleza, es un movimiento de mucha más acción.
Rana centra sus actividades en las áreas de educación, investigación y emprendimiento. Y sin mayores tapujos, asegura, a través de su director, que para solucionar los problemas medio ambientales y la conflictividad social que se deriva de éstos, proponen privatizar los recursos. Dicho de otra forma, asegura Chapas, hay que devolverle los recursos al ciudadano.
De acuerdo con el pensamiento libertario de Chapas, los problemas tienen su origen en algo que se denomina la Teoría de la Tragedia de los Comunes, planteada por Garret Hardin, en 1968. Según este planteamiento, los grupos de individuos, motivados solo por el interés personal y actuando independiente, pero racionalmente, terminan por destruir un recurso limitado, aunque a ninguno de ellos, ya sea como individuos o en conjunto, les convenga que tal destrucción suceda.
Por ello es que Chapas invita a los gerentes a pensar en que debe considerarse la propiedad privada como la mejor forma de solucionar los problemas que nos aquejan en materia ambiental, pues solo la garantía de saber que algo nos pertenece hará que lo protejamos y así luchemos por un mejor territorio.
Por supuesto que el director ejecutivo de Rana no deja de plantear otras acciones que deben mejorarse paralelamente. Por ejemplo, menciona el necesario fortalecimiento del sistema de justicia, pues sin él la garantía de la propiedad sería utópica.
Estos cambios deben promoverse en el Congreso, junto a otros esfuerzos que nos hagan un país diferente al actual, puntualiza Chapas, quien dentro de sus argumentaciones asegura que la propiedad pública solo genera corrupción y burocracia, y eso está más que comprobado.
Por si fuera poco lo anterior, también debe analizarse desde el punto de vista de los costos económicos, pues tanto la corrupción como la burocracia incrementan, en cualquier país, los costos de transacción.
Para mejorar el ambiente y lograr cambios reales, Chapas, en representación de Red Rana, propone trabajar con base a tres principios fundamentales: la necesidad de un gobierno limitado, el fortalecimiento de los mercados libres y la garantía de la propiedad privada. De acuerdo con sus postulados, está demostrado que trabajar con principios socialistas o mercantilistas no se solucionan los problemas sino más bien se incrementan.
Por ello, Chapas dice puntualmente que los guatemaltecos debemos exigir reformas de calidad en leyes como la Electoral y de Partidos Políticos, pues en ese sentido podría comenzarse un cambio en el tipo de personas que lleguen a los puestos de poder.
Continuar con el sistema político que rige en la actualidad sería mantener la misma historia que nos viene gobernando desde hace muchísimos años y por lo cual el país no prospera. Con lo anterior, el empresario intenta demostrar que la conflictividad social es un problema estructural-histórico, pero también que no es la industrialización de los países la que genera complicaciones en el ambiente pues, según él, la incidencia humana en los cambios climáticos es mínima.
Chapas es de quienes piensan que el Cambio Climático no es resultado perse de la acción del hombre sino más bien de los ciclos naturales del planeta. “No es la primera vez en la historia de la Tierra que se eleva la temperatura sin control o que se congela la superficie terrestre”, dice.
Lo anterior, según él, solo es una teoría que nos dice que tenemos tiempo para mejorar y lograr, a través de los cambios jurídicos, sociales y económicos, tener un medio ambiente más apto para todos y así disminuir los eventos que ponen en riesgo tanta vida de guatemaltecos.
Esta es la visión empresarial más fuerte que existe en el país en torno a los problemas medioambientales y sus soluciones. Pero, por supuesto, son explicaciones que en nada convencerán a sus opositores sociales que explican la degradación del ambiente en la acción industrial, principalmente en la industria extractiva y en la forestal que, según ellos, debilitan la tierra y los cauces acuáticos al generar grandes fenómenos que atentan contra la vida de muchos connacionales.
Carlos Morales Monzón
Periodista y Profesor Universitario
cmoralesmonzon@yahoo.com