Concreto con olor y personalidad

El espíritu emprendedor es el motor que permite que las personas asuman la iniciativa, sean creativas, aprendan a tomar decisiones y busquen respuestas positivas ante los retos que la vida les plantea. En esa dinámica, que da paso a la “cultura emprendedora”, se generan ideas interesantes y útiles que aportan beneficios al ambiente y a las personas. Este es el caso de la empresa familiar Di-Color, que nace en 2011 bajo la sombrilla de la reconocida mar- ca guatemalteca Pinturas de Guatemala (Pindegua), y que ofrece al público pintura arquitectónica e industrial de alta calidad y de muy alto desempeño.

La empresa nace como un centro de distribución para acabados arquitectónicos especiales, a raíz de una estrecha relación con Pindegua, quien fabrica pinturas que se adaptan a requerimientos muy específicos por parte de los consumidores, tanto en la calidad como en la duración del producto. De allí que, su cartera de clientes incluye hoteles y parques recreativos que buscan algo diferente: cartillas no convencionales, efectos de aluminio, poliuretanos, perlescentes (perlados) y otros acabados.

Stefano Pagurut Berthet, gerente comercial de Di-Color, comenta que los clientes les solicitan acabados diferentes, por ejemplo, que simulen roca o madera, así como aplicaciones para diferentes superficies, como fibra de vidrio, acero, mdf o concreto. Y la especialidad de ellos es fabricar el producto y, además, brindar la asesoría y la garantía de que “el sustrato que van a recubrir es compatible con la superficie”, comenta.

Y es que, la pintura no solo debe cumplir un fin estético. Sin duda, su principal función es la protección. En el caso del metal, Pagurut lo compara con la alquimia, porque se debe transformar para otorgarle las mismas propiedades que al oro; es decir, que no se oxide, no se degrade y no sufra al igual que otros metales.

El metal expuesto a la intemperie -así sea de muy buen acero- va a sufrir cambios. Y de esta forma se pierden inversiones millonarias. “Nosotros nos enfocamos en hacer que las estructuras, del material que sea, sean resistentes a todos los efectos de la naturaleza”, indica este ingeniero químico y máster en administración de empresas, conocimientos que también le permiten liderar el laboratorio de Investigación y Desarrollo en Pindegua.

Pagurut explica que, las estructuras pueden degradarse debido a la lluvia ácida, la niebla, la sal, el óxido, la corrosión e incluso microbios, como las algas. Por ello, lo mejor es hacer una inversión inteligente que las recubra con materiales de alto desempeño. Posteriormente, hay que brindarles el mantenimiento debido para que perduren.

A nivel mundial hay interesantes ejemplos a considerar, como la monumental estructura del Golden Gate Bridge, en San Francisco, California. Esta magna edificación debe resistir a diario una serie de amenazas. Por ello, nada mejor que la pintura de alto desempeño para anticiparse a los efectos de la corrosión. Este puente colgante, conocido como Puerta Dorada, fue construido en los años 30 del siglo pasado y ha forjado toda una leyenda a lo largo del tiempo. Para mantener su impecable rojo anaranjado, su pintura debe ser retocada casi a diario, además de que sus distintas partes se vuelven a pintar cada 10 o 20 años.

Aunque a otra escala, siempre hay proyectos arquitectónicos que requieren del ingenio de creativos que puedan acoplar los productos tradicionales a las nuevas necesidades. Y esta fue la oportunidad que aprovechó Pagurut, quien comenta que, en aras de satisfacer las necesidades de los clientes, han creado productos sin precedentes en Guatemala, entre ellos la innovación más reciente: un tinte que no solo le da color al concreto, sino también brillo y textura.

El tinte es tan versátil que de la creatividad de cada uno depende las múltiples aplicaciones que pueda tener. Surgió a partir de una petición especial solicitada por el Irtra de Retalhuleu, específicamente para el parque Xejuyup. “Desde hace más de dos décadas ellos ya usaban la marca G77, una de las marcas de Pindegua. En una ocasión, solicitaron un sustrato que proveyera acabados diferentes y que pudiera ser expuesto a las inclemencias del tiempo. La idea era fabricar casas en los árboles que se pudieran camuflar con la selva de Retalhuleu, pero que fueran de un material duradero y versátil como el concreto, y que la apariencia fuera lo más natural posible”, cuenta a GERENCIA.

Fue entonces cuando un ingeniero del Irtra le comentó que había visto imitaciones de roca en Disney, y que necesitaba que le fabricara algo similar. “Busqué el producto en Estados Unidos y México, pero por el precio lo mejor era fabricarlo. Regresé a la base teórica de la química, hice pruebas, comencé a experimentar fórmulas y conseguí los reactivos. Fue como inventar el agua azucarada”, cuenta a GERENCIA.

Rockstain es el nombre de esta innovación que durante un año estuvo en fase de prueba y desarrollo, y que hoy está lista para ser aplicada y así brindar color y textura de forma permanente a toda superficie de concreto. Con la garantía de ser un producto de calidad, que reduce los tiempos de mantenimiento. De hecho, el tinte se aplica una sola vez y dura lo que dura el concreto, el mantenimiento con- siste en la aplicación de un sellador cada cinco años, y en menos tiempo cuando el clima es extremo.

A este tinte, Pagurut ha agregado otras innovaciones, como el desarrollo de texturas en las planchas de concreto. De esa forma, en su catálogo cuenta con planchas que simulan las vetas de la madera, lo que se refuerza al aplicar el tinte color tierra. Así también, vetas que grafican el mármol, y como la aplicación del tinte no puede ser pareja, el concreto se torna en diseños muy originales.

Al preguntarle a este emprendedor qué ha sido lo más difícil de este negocio, comenta que cambiar la percepción del guatemalteco en cuanto a que una pintura nacional puede ser de una calidad superior.

“A veces se cuenta con la calidad, pero no con el reconocimiento de la marca. Y ese es un reto en el que debemos enfocarnos, porque las pinturas que fabricamos son de alto desempeño y hay un ahorro importante si se comparan con productos importados”, dice.

Por otro lado, el químico agrega que, el mercado guatemalteco está suplido por pintura de calidad económica; pero que ese es un ahorro relativo, porque es solo para darle color a las superficies y entregar la obra, pues al pasar el primer invierno habrá que pintar de nuevo. “Con una pintura tipo A se puede espaciar el mantenimiento y la compra de material hasta cinco o más años. La mano de obra compensa el ahorro”, concluye.

Por su parte, entintar una superficie de concreto es mucho más económico que invertir en piso exterior. El ahorro es de un 70% entre entintar o invertir en un modelo de piso económico que cueste alrededor de Q75 el metro, ya instalado, y de más si los pisos son más onerosos. Y esto porque su aplicación es muy fácil, lo puede hacer cualquier persona con una pistola para pintura, con aerosoles o rodillo. Se puede aplicar en patios, contornos de piscinas, garajes, para el sector de los suburbios, encaminamientos o macetas, por mencionar algunas superficies. Y lo mejor es que el concreto posee buenas propiedades, como la de tracción y resistencia al deslizamiento.

Los colores disponibles son trigo, bronce, rústico, jade, aqua y grafito, que equivalen a amarillo óxido, rojo óxido, café, verde, azul y gris oscuro. Es una gama que se encuentra en la naturaleza, es resistente al exterior, no se degrada y seguro le dará un toque especial a alguno de los ambientes de su hogar.

Ileana López
Directora Revista GERENCIA
gileana@agg.com.gt