En búsqueda del perfeccionamiento
La competitividad demanda que empresas y organizaciones capaciten continuamente a su personal
En el mundo moderno, cada vez más las empresas están a la búsqueda de profesionales mejor capacitados para desarrollar las tareas. La gente creativa y con iniciativa probablemente disponga de mayores posibilidades de acceder a los puestos mejor remunerados, y para adquirir esas habilidades nada mejor que la capacitación en campos específicos.
Capacitar al personal es un proceso de larga duración, aunque cada curso en sí sea de corto plazo. No sustituye a la educación formal ni pretende competir con ella. Más que brindar los conocimientos generales que permitan mejorar la calidad de vida, lo que busca es que los trabajadores y ejecutivos adquieran las herramientas que les ayuden a mejorar su eficiencia y acrecentar la eficacia en el logro de sus objetivos profesionales y laborales.
Herramienta laboral
Mediante la capacitación lograremos que un trabajador determinado alcance el perfil que buscamos para el puesto que necesitamos cubrir en una empresa. Pero hay que aprovechar los conocimientos de que ya dispone dicho empleado, a manera de hacer aún más eficaz esta herramienta.
La capacitación debe estar siempre a tono con el puesto que se ocupa o con los planes estratégicos de la empresa u organización de que se trate, su misión, visión y valores. Una primera capacitación puede ir dirigida precisamente a estos valores, como el trabajo en equipo, el respeto a los individuos, la exigencia de calidad, entre otros, lo que después se convertirá en acciones para beneficio de la empresa.
Hay luego una capacitación de servicio al cliente. La idea es tratar a este de la mejor manera, en un medio en que cada día hay mayor competitividad entre empresas. Con el tiempo, se espera que se reduzcan las quejas de la clientela y que aumente la cantidad de consumidores de nuestro producto o servicio.
Finalmente, encontramos la capacitación para el trabajo en equipo. Esto aumenta la eficiencia general de la empresa u organización al hacer que el empleado se sienta más identificado con aquella al percibir que participa de manera activa en su desarrollo.
Objetivos
La capacitación persigue varios objetivos, relacionados todos con la eficacia de los procedimientos y la eficiencia para alcanzar los resultados. Entre aquellos podemos mencionar la productividad, la calidad, la planeación de los recursos humanos, las prestaciones indirectas, mejora de la salud y seguridad laborales, y prevención de la obsolescencia.
Por ello, los programas de capacitación son también de gran relevancia para el Estado, que debe promoverla y gestionarla en el nivel macro, es decir, mediante instituciones que la brinden, especialmente para trabajadores de escasos recursos. Es pues necesario que desde la administración se logre un compromiso de largo plazo para el perfeccionamiento laboral, que a la larga redunde en una mejora de la productividad nacional y de la calidad de vida personal.
Este es precisamente el objetivo final de toda capacitación: que las personas implicadas logren mejorar sus condiciones personales, profesionales y de expectativas laborales.
Cursos AGG
En Guatemala, una de las principales instituciones que se encargan de ofrecer sistemáticamente la capacitación y que más gerentes capacita en Guatemala es la Asociación de Gerentes de Guatemala (AGG), fundada hace 63 años como entidad voluntaria, apolítica y sin fines de lucro. Su finalidad esencial es “formar gerentes líderes que hagan competitivas a sus empresas, y de esta forma contribuir a la sociedad”.
Para el año 2021, la AGG, por medio del Centro Gerencial (Cege) cerró con más de 30 cursos y programas impartidos de forma virtual, una condición que cambió a partir de la pandemia y que ha proveído excelentes resultados para las empresas. Además, de la capacitación que imparte a sus asociados, como parte de los beneficios de la membresía, y los que desarrolla a la medida de las empresas, a través el Centro de Desarrollo Organizacional (CDO).
Por otro lado, la AGG ofrece cursos tradicionales de larga duración, que han dado lugar a generaciones enteras de ejecutivos con una preparación acorde al desarrollo y expectativas de la gerenciación en Guatemala. Entre ellos, se encuentra el Curso Integral de Perfeccionamiento Ejecutivo (CIPE) o los programas de Promipyme, dirigidos al segmento emprendedor del país.
Carlos Tárano
Periodista
Revista Gerencia
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