Mujeres divinas

“Las horas más hermosas de mi vida, las he pasado al lado de una dama...”, dice Vicente Fernández en su canción Mujeres divinas

En el último siglo y en especial en el mundo occidental, muchas de las mujeres han variado sus roles en la sociedad, particularmente en lo profesional. Es para mí un honor referirme a trece guatemaltecas que ha escogido la Asociación de Gerentes de Guatemala como destacadas, excelentes, maravillosas y admirables, para conmemorar en marzo el Día Internacional de la Mujer.

MARÍA DEL CARMEN ACEÑA

A varias de ellas las conozco, con la mayoría he trabajado y a todas admiro por sus éxitos. Ellas son altruistas, empresarias, destacadas profesionales y gente joven que participa en actividades interesantes, como medios de comunicación, arte, deporte y cocina.

Contar con una mujer como Isabel Gutiérrez de Bosch es un lujo. Su amor por Guatemala y trabajo de hormiga por el desarrollo de las niñas es alentador. Por medio de la fundación Juan Bautista Gutiérrez, Fundaniñas y el Club Rotario ha tocado infinidad de vidas para el bien. Es emprendedora e innovadora, comparte su ser y su amistad con quien la rodee. También es bondadosa y humilde, encabeza una familia amorosa y vive comprometida con Guatemala. Es una mujer realmente inspiradora y amena.

Conocí a Yolanda Fernández de Cofiño, doña Yoli, hace varios años. Es admirable como al fallecer su esposo tomó las riendas de la empresa y juntamente con sus hijos expandió McDonald’s a más de 70 restaurantes en Guatemala. Muchos recordamos el primero de ellos en la zona 1, así como la invención de la Cajita Feliz. Con decisión, estrategia y carácter también logró colocarse en los corazones de los guatemaltecos mediante actividades como el McDía Feliz, realizado una vez al año, al comienzo como apoyo a la Fundación Aldo Castañeda y actualmente a su fundación.

Pero si hablamos de empresarias, en las conversaciones y listas de participación se encuentra la dinámica Diana Canella, gerente general de Canella, S.A., vendedora nata y vanguardista con la tecnología. Destaca por su deseo de apoyar a instituciones relacionadas con la educación en Guatemala, como la Asociación de Gerentes y Empresarios por la Educación. El fallecimiento conmovedor de su padre marcó su vida, pero no sólo logró sobreponerse a la tragedia sino nos benefició a todos con su pasión, perseverancia y capacidad.

Camotán y Jocotán no hubieran salido adelante hace unos años sin la mano caritativa e innovadora de María Pacheco. Llena de imaginación, bióloga de profesión, empresaria rural, fundó Kiej de los Bosques. Gracias a ella y a su equipo cientos de mujeres han aprendido a soñar, emprender y accionar para su desarrollo y el de su hogar. Su empresa se ha destacado por la transformación de vidas, la introducción de productos alternativos y los desafíos que ha provocado en el mundo empresarial tradicional. Ella brilla como una estrellita al brindar esperanza a otras guatemaltecas.

Una sorpresa del siglo XXI son las jóvenes que cuentan con grandes aspiraciones y en corto tiempo han logrado puestos destacados, como Yara Argueta. Su paso por el Grupo Solid en uno de los cargos más importantes muestra su empeño. Junto con otras mujeres maravillosas ha emprendido Voces Vitales, desde donde buscan mejores oportunidades para las guatemaltecas.

Una de esas voces es Aura Leticia Teleguario, mejor conocida como Letty. Una persona activa, quien representa con gran orgullo y capacidad a las mujeres y, a mucha honra, también a las mujeres indígenas de nuestro país. Ha sido una persona clave para tender puentes entre sectores. Su pasión: enseñarles a los jóvenes y mujeres a ser empresarios, especialmente a la población maya. Su chispa y energía nos hacen vibrar local e internacionalmente.

Además, contamos con mujeres que han trascendido fronteras como Carolina Castellanos. Franca, eficiente y trabajadora. Su profesionalismo y entrega hacia lograr un mejor ambiente para las empresas norteamericanas en Guatemala ha sido notable. Siempre a la vanguardia y al servicio para obtener una mayor inversión para el país. AmCham, como Cámara, sobresale con sus eventos y servicios debido especialmente a su directora.

María Antonieta del Cid de Bonilla ha destacado como una de las mejores profesionales en el campo de las finanzas. Por varios años trabajó en el Banco de Guatemala, en organismos internacionales y, adicionalmente, fue Ministra de Finanzas. Hoy se desarrolla en el sector privado. Una mujer “cabal”, pan pan-vino vino, de palabra y acentuada firmeza. Fue una buena compañera de trabajo, con quien se puede soñar, planificar y “ejecutar”. Técnica y aterrizada.

Lorena Calvo, defensora de la naturaleza, los animales y los derechos de las mujeres. Su aporte al Zoológico La Aurora fue fantástico. Aprendemos con ella que todo es posible para quien cree. Ha participado en otras actividades de beneficio para el país y ahora como empresaria ha formado la Asociación de Mujeres en Café, integrada por damas fantásticas, llenas de energía y alegría, que buscan romper barreras en uno de los gremios más tradicionales del país.

Igualmente destacan mujeres jóvenes, positivas, dulces y frescas. María del Rosario –Tuti Furlán- nos proyecta con sus acciones y programas un mundo mejor. Psicóloga, periodista y locutora de una nueva generación. Nos ha ilustrado que sonreír es el acto más sencillo y gratificante que todos podemos hacer día a día. Es apreciada y querida, y sabemos que será una mujer influyente en la actitud positiva de los guatemaltecos –una nueva cultura que nos urge… ¡Vivir a colores!

Adicionalmente, esta nueva generación aporta mujeres subrayadas a nivel mundial en otras áreas, como la música, el deporte y la cocina: Gaby Moreno, Andrea Cardona y Mirciny Moliviatis.

Gaby, cantautora y guitarrista, se proyecta con su música blues, jazz, soul y R&B. Ella es una buena mezcla entre talento y carisma. Ejemplo de tenacidad para todos. Orgullo nacional. Pronto a la conquista de uno de los mercados más desafiantes: México. Reconocimiento por representar a nuestro país en el arte.

Andrea, experta en turismo, desde muy pequeña aprendió de sus padres a escalar volcanes. Estudió turismo económico en Italia, ambiente que la influyó para conquistar las alturas. Se propuso como reto ser la primera mujer centroamericana en escalar los picos más altos de la tierra. Ya llevó nuestra bandera a los tres polos del planeta y también es la primera mujer de Centroamérica y del Caribe en alcanzar la cima más alta del mundo, el Monte Everest. Tanto que aprender de Andrea… sueños, metas, planes, intentos, trabajo y éxitos.

Y para cerrar con un buen postre, ¿qué tal una crema de elote a la vainilla? De nuestra increíble chef Mirciny. Formada en varios países en cocina internacional, destacada por lograr sabores chapines presentados con creatividad. Una mujer organizada, de buen gusto. Gran potencial. Especialista en “paladares escépticos”, ¡me encanta!

He aquí inspiración, pasión y acción, simplemente mujeres divinas. Cabe recordar que cada mujer posee su encanto, su talento y su misión. Por ello, es trascendental que todas encontremos nuestra causa y emprendamos nuestro camino para servir a los demás y para lograr satisfacciones personales que engrandezcan a nuestro país y que muestren al mundo que, Vicente Fernández tenía razón… no queda otro camino que adorarlas.

¡Gracias a todas por su aporte a la humanidad!

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