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El costo beneficio de las motocicletas eléctricas

Un mercado difícil pero preparado con muchas fortalezas en el futuro

«Con el tráfico que hay y con lo que se complicará más tarde, lo más barato es comprar una moto o una bicicleta», dicen distintas personas que platican acerca del tráfico, el automóvil o el transporte público.

Lo único es que no se trata solo de comprar una motocicleta. Esta necesita mantenimiento y combustible para circular en la ciudad o en el interior. Este pequeño espacio es aprovechado por quienes están innovando en la venta de motocicletas eléctricas o de carga eléctrica.

Aunque el beneficio costo-mantenimiento junto con la promoción del cuidado del medio ambiente a veces llama la atención del cliente final, todavía no impacta para lograr una venta final en la distribuidora de motos eléctricas.

Según Blanca Leiva, ejecutiva de Motos Eléctricas Shun Feng, la distribuidora junto con su competencia fueron los primeros en traer a Guatemala las motocicletas eléctricas. “Tenemos dos años en el mercado y la distribución en la capital y el interior ha sido lenta pero firme”, expresa Leiva, quien opina que la gente ha sido temerosa y mal informada.

Según la ejecutiva, sus clientes le han expresado el temor de utilizar una bicicleta eléctrica bajo la lluvia o que sea afectada por el polvo, a lo que ella ha respondido: “la tecnología actual ha hecho que las baterías y los motores eléctricos se perfeccionen a tal grado, que no existe peligro en utilizar una moto eléctrica”.

Leiva observa ventajas como el interés por el cuidado del medio ambiente, lo relajante de manejar un motor eléctrico y el factor económico. “Nuestras motos recorren 100 kilómetros y consumen aproximadamente Q3.50 por cada carga”, afirma Leiva.

Las motos distribuidas por Shun Feng son de fabricación china y son estilos pasola con motores desde 1,000 a 3,000 watts.

Autonomía, la gran diferencia

Para Leiva, como para otros distribuidores como Vinicio Rivas, de Altermovum, la autonomía de una motocicleta eléctrica todavía es poca comparada con una de gasolina. Ambos expertos afirman que las motocicletas eléctricas todavía son vehículos totalmente urbanos, en donde es posible trasladarse de zona a zona y no de municipio a municipio.

Por su parte, Vinicio Rivas, distribuidor de la marca Stigo (ver apartado), indica que la motocicleta eléctrica es una alternativa a la movilidad del tráfico en Guatemala. “Son tan pequeñas y estrechas que entre más tráfico haya, más rápido circulan”, expresa Rivas.

Esta motocicleta es idónea para utilizarla en zonas como 9, 10, 13 o 14. Según Rivas, la Stigo no podría llegar a subir la Cuesta de Villalobos o Carretera a El Salvador, ya que su autonomía es de 20 kilómetros por carga. Aunque este es el Talón de Aquiles de muchos motores eléctricos, cada día las tecnologías se perfeccionan y llegan a desarrollar motores más eficientes en su desempeño.

Ahorro en mantenimiento

Si la autonomía les baja los ánimos a algunos (por el momento), el ahorro en mantenimiento a corto y mediano plazo hace que los clientes lleguen a tomar una decisión final.

Vinicio Sosa explica que, luego de la inversión inicial; es decir, la compra, no ha tenido que gastar en servicios o aceite adicional. “En los dos años que he utilizado mi propia motocicleta solamente he invertido en frenos nuevos, y ni siquiera he sentido el impacto en mi factura eléctrica”.

Este ahorro ha motivado a que empresas e instituciones se interesen en el producto para promover el uso de electricidad limpia y ahorro en sus activos. “Compañías como la Empresa Eléctrica, un ingenio e incluso un restaurante de comida rápida nos hicieron una prueba y ya compraron un lote de dos modelos nuestros”, expresa con orgullo Leiva.

La compra ha generado mayor movimiento en sus ventas, al punto que ya cubren todo el país con ventas individuales. Gracias a la opción de las cuotas y el leasing ven circular motocicletas eléctricas en las cabeceras de Quetzaltenango, El Progreso, Puerto Barrios, Escuintla, Jalapa y Chiquimula.

Aunque no necesiten mantenimiento, nuestra distribuidora ofrece seguro, cobertura completa, taller, repuestos, accesorios y departamento técnico”, expresa Leiva.

A futuro

Tanto Leiva como Rivas coinciden en que el mercado está naciendo y existen muchos retos por superar. Tanto la falta de información como las comparaciones con las motocicletas de gasolinas hacen que los compradores elijan estas últimas.

Aunque países como Costa Rica ya sustituirán cerca de 400 unidades en los próximos 5 años para la flota de Correos de Costa Rica, Guatemala comienza a probar la versatilidad de las motos y vehículos eléctricos, al utilizar algunas de sus unidades para la Policía Nacional Civil (PNC) y la División de Seguridad Turística (Disetur).

Esto anima a ejecutivos como Leiva a seguir promoviendo el uso de energía limpia por medio de las motos eléctricas. “En septiembre, llegarán nuevos modelos, con mejoras en tecnología y autonomía. Con eso nos convertimos en la piedra en el zapato de otros”, finaliza.

 

Pedro A. Barrera
Periodista
Revista GERENCIA
editorialgerencia@agg.com.gt

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