Videojuegos, una ventana al futuro arquitecto

Una ventaja de los videojuegos es desarrollar capacidades que en el futuro podrán ser de utilidad para nuestros hijos o para nosotros mismos

En los años ochenta surgió la moda de los videojuegos y, por ende, existieron fieles seguidores y otros con opiniones en contra. La tecnología ha avanzado y los videojuegos dejaron de ser solo una gran máquina tragamonedas conectada en un local de un centro comercial. Hoy, los videojuegos se encuentran instalados en los mismos teléfonos móviles o en la televisión.

Muchos arquitectos e ingenieros civiles coinciden en que hoy se han cambiado los planos por programas informáticos. Algunos como AutoCad, Revit, 3DS Max, Archicad, SketchUP sirven para que estos profesionales modelen y desarrollen su proyecto inmobiliario de la mejor forma.

Desarrollo de habilidades
Para los futuros profesionales de la arquitectura e ingeniería civil el uso de estos programas no es nada ajeno a su vida cotidiana. Los jóvenes de ahora utilizan videojuegos que asemejan este software y fomentan múltiples habilidades. Según la ingeniera Alhvi Romancina Balcárcel, desarrolladora de videojuegos, todos aprendemos jugando y el juego es una parte importante de nuestra cultura. Los videojuegos son nada más otra forma de jugar, que se suma a los juegos de mesa y deportes.

“Los juegos nos pueden enseñar las habilidades del siglo 21; es decir, la creatividad, innovación, solución de problemas, comunicación, colaboración, razonamiento cuantitativo y pensamiento lógico”, explica Balcárcel.

Minecraft, un juego ad-hoc
Balcárcel es miembro de la comunidad GameDevGT, la que reúne a desarrolladores y diseñadores de videjuegos en Guatemala, e indica que una de las habilidades más importantes en la actualidad es la creatividad. “Juegos como Minecraft pueden ayudar a los niños y jóvenes a desarrollarla, al permitirles crear prácticamente cualquier objeto o ambiente dentro del juego. Los juegos cooperativos son buenos para practicar habilidades de comunicación y trabajo en equipo”, afirma la experta.

Minecraft es un juego de mundo abierto. Es decir, este juego no tiene una meta final o un objetivo específico, como lo son otros juegos. Esto permite que el jugador tenga libertad a la hora de elegir su forma de jugar.

Este videojuego se centra en la colocación y destrucción de bloques tridimensionales, ordenados en un tipo de rejilla. Los bloques representan elementos cotidianos como troncos, piedras, minerales, etc. Por ser un juego abierto, los jugadores pueden desplazarse libremente por el entorno y modificarlo. El jugador puede modificar lo que le rodea por medio de la creación, recolección y transporte de los bloques del juego.

Minecraft es todo un mundo, ya que los ambientes representan desiertos, sabanas, selvas, océanos, llanuras y tundras. Incluso, el juego posee su propio ciclo de tiempo de día y noche. Para los experimentados, un día en el juego son 20 minutos en la realidad.

Construyendo el propio mundo
Minecraft se caracteriza por el uso de bloques para construir todo tipo de edificios. Por ser un juego creativo, los usuarios han desarrollado verdaderas ciudades que llaman la atención por su detalle y valor histórico.

Uno de los proyectos más ambiciosos de Minecraft fue reconstruir la ciudad de Beijing en 1751. Este proyecto lleva más de 5 años y está disponible en MinecraftEDU para enseñar sobre historia, lenguaje y geografía. También existen proyectos como el área que rodea la Torre Eiffel y el Campo de Marte, en Francia, y Nueva York en 1936. Esta creación la realizó un usuario con el objetivo de mostrar los detalles arquitectónicos de Manhattan antes de la Segunda Guerra Mundial.

También existen ciudades del futuro creadas por Minecraft como Hydros, Future City 3.1, Adamantis e Imperial City. La mayoría de ellas tienen valor estético mientras otras han servido para innovar en el uso de servicios básicos para las ciudades.

Es así que incluso la Organización de las Naciones Unidas anunció un acuerdo con Mojang, la empresa desarrolladora de Minecraft, para crear el proyecto Block by Block. Esta iniciativa busca implicar a los jóvenes en el rediseño de zonas urbanas, especialmente en países donde los recursos son limitados o cuentan con poca experiencia profesional en el área de urbanización.

Pedro A. Barrera
Periodista
Revista GERENCIA
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